El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, apeló este miércoles a la aplicación efectiva y total de la amnistía el próximo año, que permitiría la vuelta del líder de Junts, Carles Puigdemont, para tratar de aplacar las críticas de Junts y ERC por su “falta de ambición nacional” y la “supeditación de su cargo a los intereses del PSOE”. Un recurso “compartido” por buena parte de la Cámara catalana, según remarcó el jefe del Ejecutivo catalán, con el que culminó un balance político del año 2025 en que “lo hemos hecho bien” y ante un 2026 en que “lo haremos mejor”, aseguró.
En la última sesión de control al president del año, Illa recibió las reprimendas de Junts, ERC, la CUP y el resto de los partidos de la bancada de la derecha por distintos motivos y prácticamente solo contó con la complicidad de los Comuns tras los últimos acuerdos en materia de movilidad -el mantenimiento de las bonificaciones de los transportes para el próximo año- y vivienda.
Junts y ERC coincidieron en hacer un balance pírrico de la gestión del Govern en el 2025. “¿Qué ha logrado? Nada, crear comisiones, grupos de trabajo…” pero “descontada su propaganda lo único que ofrece es parálisis, un gobierno a la espera”, reprochó la líder del grupo posconvergente, Mónica Sales. Un cómputo al que se unió el líder de los republicanos en la Cámara catalana, Josep Maria Jové, al señalar que los socialistas “acaban igual que empezaron” el año, “sin presupuestos y sin la estabilidad que anhelan porque siguen vinculando al PSOE” su acción de gobierno. En definitiva, ERC define al Ejecutivo catalán como “un gobierno en stand by, sin rumbo claro”.
ERC
“Acaban igual que empezaron” el año, “sin presupuestos y sin la estabilidad que anhelan porque siguen vinculando al PSOE” su acción de gobierno
Lo único que unió a las tres partes, a Illa, Junts y ERC, fue precisamente la necesidad de que la amnistía se haga efectiva definitivamente en el 2026, un elemento que configura, como así lo manifestó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el pasado lunes desde Moncloa, uno de los leitmotivs elementales de la segunda parte de la legislatura española, junto a la gestión de los fondos europeos. A este hilo conductor, introducido en el pleno por Sales al señalar el deseo de su grupo de que “se haga realidad la amnistía y que aquí estemos todos”, al que se agarró Illa para remarcar que “quiero, como usted, que el 2026 se haga efectiva la amnistía. Sería paso adelante muy importante de todos”.
Aunque Jové no mencionó de forma explícita la amnistía y se refirió a la necesidad de resolver “el conflicto político con el Estado para decidir conjuntamente el futuro político, votando”, el president insistió en su deseo político para el próximo año: “Tenemos que estar todos”.
Juns recrimina que Illa ha “renunciado a gobernar con ambición. Cumple poco y promete mucho”
En cuanto al balance del año, Junts lamentó que Illa ha “renunciado a gobernar con ambición”, de manera que “cumple poco y promete mucho”, y describió un panorama caótico en “los servicios públicos”, un “país colapsado” y con una lengua que “retrocede”. En cambio vendió los logros de su formación en Madrid en materia de lucha contra la multirreincidencia, el servicio de verificación de facturas, o las competencias de Catalunya en el ámbito local -secretarios e interventores-, que “son resultados, de Junts y para Catalunya”.
Por su parte, Jové reclamó a Illa la “rinanciación justa y singular, indispensable para negociar cualquier presupuesto”, y trabajar para “superar un régimen donde la corrupción es inherente”. “Cumpla y haga cumplir lo que firmó”, requirió el portavoz.
“En el 2025 los hemos hecho bien y en el 2026 lo haremos mejor. Catalunya está centrada, genera más prosperidad que nunca”
El balance del president fue más optimista. “En el 2025 los hemos hecho bien y en el 2026 lo haremos mejor. Catalunya está hoy centrada, genera más prosperidad que nunca”, describió antes de echar mano de los datos de ocupación, del IPC, de señalar que ahora se construye “más vivienda que nunca” y hay “más seguridad que nunca para todos”. Illa advirtió de que no pretendía hacer un “balance triunfalista”, pero tampoco es partidario de “ir autofragelándonos”.
Tras remarcar ante Jové su compromiso con el cumplimiento de los acuerdos de investidura, en especial en materia de financiación singular, sobre lo que aseguró que el Govern está “trabajando” y garantizó que “sudaré la camiseta”, reconoció que “no es buena noticia que el coste de vida siga creciendo para los ciudadanos”, pero remarcó que él y los republicanos comparten el “enfoque” de que para mejorar la situación es primordial actual sobre el problema de la vivienda.
Illa defiende la actitud del PSOE ante los casos de corrupción y acoso y anima a denunciar
La situación de la legislatura española, marcada por los casos de presunta corrupción y acoso sexual en el PSOE, fue introducida por la CUP. Ante las críticas del portavoz, Xavier Pellicer, Illa instó a denunciar a “quien tenga datos de que ha habido algo mal hecho”, si bien reivindicó que la reacción de los socialistas ante estos casos ha sido de “máxima contundencia”. El president rechazó cualquier acusación de encubrimiento ante estos casos pero aseguró que nunca dará cobertura “ni a denuncias falsas ni a falsas insinuaciones”. El panorama descrito por los anticapitalistas, en que “todo va mal”, Illa advirtió de que “quizás eso es lo que genera desafección”.
El tono del president se endureció ante las acusaciones de PP sobre la gestión de la DGAIA, de Vox por vincular el colapso de los servicios sociales a la inmigración y delincuencia, y de Aliança Catalana. Illa instó al líder popular, Alejandro Fernández, a no hacer política “de chimenea estrecha” con el servicio de acogida a menores inmigrantes, como a su juicio ha hecho el PP en el caso de los menores de Canarias. Y tachó de “mentiroso” al líder del partido ultra, Ignacio Garriga,, por vincular el colapso de la sanidad estos días a la inmigración.

Hace 2 horas
1




English (US) ·